Errores a evitar en la gestión de residuos de podas

29 Oct Errores a evitar en la gestión de residuos de podas

En general, aunque en ocasiones depende de cada municipio, podemos hablar de que las podas de árboles se dan durante el invierno. Si abrimos algo más el intervalo, lo normal es que se lleven a cabo desde noviembre hasta marzo, aprovechando que durante la época invernal los árboles se encuentran en estado de reposo. Así se gestiona su crecimiento y desarrollo para la siguiente brotación en primavera, siendo la poda, además, muy necesaria para cuidar su salud, garantizando su crecimiento de forma bonita, pero, sobre todo, sana. Ahora bien, es importante hacer una buena gestión de residuos de podas. ¿Sabes cómo actuar? Te dejamos algunos errores que nunca debes cometer. ¡Está en tu mano hacerlo bien!

Evitar estos errores en la gestión de residuos de las podas

1. Dejar los restos en la vía pública: Como te puedes imaginar, las podas tienen un protocolo en cuanto a la gestión de residuos. Los restos generados deben ser depositados en un contenedor y tratados por un gestor y transportista de residuos no peligrosos, como somos en Arcecon Recuperaciones. Tenemos contenedores para podas de máxima calidad, si quieres contar con los mejores equipos. Dejar las podas en la vía pública es un problema de comodidad y seguridad. Pueden obstaculizar el paso de las personas y vehículos, pero, además, también se convierte en un peligro en cuanto a atraer plagas o provocar incendios. 
2. Quemar sin permiso: Otro fallo, y este es bastante grave, es quemar las podas. Como te hemos dicho, los residuos de este proceso deben ser transportados y tratados de forma correcta para generar un reciclaje eficaz. Cuando se queman, lo único que se está consiguiendo es que liberen gases, los cuales favorecen una importante contaminación. Al margen de todo esto, no debemos olvidar que nos volvemos a encontrar con la posibilidad de que se generen incendios. Ten mucho cuidado porque, además, quemar estos residuos supone la imposición de importantes multas y sanciones. 
3. No triturar y mezclar: Los restos de una poda, cuando no están bien triturados, ocupan mucho espacio, y eso quiere decir que no se aprovecha al máximo el volumen del contenedor, ni se facilita su transporte. Además, si no están bien partidos, tardan más en descomponerse y tampoco se facilita su reciclaje. Además, no se pueden mezclar con otros residuos, ya que nos podemos encontrar con una alteración de los mismos. Ten en cuenta que los residuos generados en las podas se pueden convertir en biomasa o compost, con lo que es de vital importancia que sean tratados de un modo óptimo.  

Estos son los fallos más comunes e importantes en ciertas empresas a la hora de trabajar en la poda de árboles. Ahora que ya los conoces, intentar hacer todo lo posible para no cometerlos. Ponte en nuestras manos y descubre que todo es mucho más fácil de lo que piensas. ¡Apuesta por los buenos comportamientos!